Cuentos biblicos para ninos

El proyecto de construccion mas grande

La familia de Noé no se mantuvo pequeña. Sus hijos tuvieron hijos y nietos, y estos, a su vez, también tuvieron hijos, de modo que pronto volvió a haber muchas personas en la Tierra.

En aquel tiempo, todos hablaban el mismo idioma y encontraron una llanura lo suficientemente grande como para vivir juntos.

Las personas de aquella época eran muy inteligentes, pues descubrieron cómo cocer ladrillos, y con ellos se podían construir muchas cosas, incluso edificios que duraban mucho tiempo y seguían en pie aun cuando su constructor ya había muerto.

Entonces dijeron: “Queremos hacernos famosos construyendo una torre que llegue hasta el cielo. Así evitaremos tener que dispersarnos por otras tierras”.

Por eso, Dios bajó del cielo y vio que los hombres podían lograr cualquier cosa mientras tuvieran un solo idioma. Entonces, confundió su lengua. De un momento a otro, nadie entendía lo que el otro decía. Esto causó un gran caos, y los grupos que hablaban el mismo idioma dentro de sus familias tuvieron que buscar un nuevo lugar para vivir.

El lugar donde se construyó la torre y donde Dios confundió las lenguas fue llamado Babel.

Más tarde, las personas empezaron a aprender los idiomas de otros pueblos y lograron grandes cosas. En la Edad Media aprendieron latín y construyeron obras impresionantes, y en la era moderna aprendieron inglés y ruso, llegando hasta la Luna o, al menos, al espacio.

Hoy en día, las personas de muchas naciones pueden comunicarse porque han aprendido distintos idiomas, pero eso no significa que se comprendan realmente. Por eso, siguen existiendo conflictos e incluso guerras.

La paz y la verdadera grandeza solo se pueden encontrar en Jesucristo. Él nos ha dado su paz y crea en nosotros un nuevo ser espiritual que puede llegar al cielo. En Él, todos tenemos un gran valor.

Dejar una respuesta

Your email address will not be published. Required fields are marked *